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lunes, 2 de mayo de 2011

Arraigarse a través de la alegría y la creatividad

Pamela Kribbe canaliza a la Tierra
Mayo de 2010
 www.jeshua.net
Traducido del inglés por Sandra Gusella


Queridos amigos,


Soy la voz de la Tierra. Os saludo a todos con alegría. Se entibia mi corazón al sentir vuestra presencia y apertura hacia mí. Extraño conectarme con vosotros. Es nuestro destino desarrollarnos juntos y conjuntamente recorrer el camino hacia un mundo nuevo, diferente.


Quisiera llevaros hacia atrás, hacia el verdadero origen de nuestra mutua conexión y cooperación. Yo soy una criatura viviente. Soy un ser consciente que os ha recibido y hospedado aquí en el planeta en épocas muy antiguas. Fui receptiva a vuestra llegada aquí en la Tierra y quise aprender y crecer por medio de vuestra presencia. Vosotros no ‘sois’ de la Tierra, provenís de las estrellas. Portáis una luz en vuestro interior que es nueva e inspirante para la Tierra y para todos los reinos de la naturaleza aquí. Permitidme que os explique.


Como planeta yo absorbo luz desde el exterior. La luz del Sol me entibia y me ayuda a procrear la vida en la Tierra. Soy inspirada por la gran fuerza del Sol y la necesito para crear y sostener la vida física sobre mi piel. El sol es una estrella. Vosotros sois los representantes del Sol. Portáis la luz del sol dentro de vuestra alma y traéis esta luz a la Tierra a medida que nacéis y os arraigáis aquí.


¿Cuál fue el propósito para que esta luz descendiese a la Tierra? ¿Cuál fue la intención detrás de vuestra llegada? Vosotros estáis aquí para traerme a mí y a todos los reinos de la creación la luz de la conciencia. Estáis aquí para despertarnos a la vida interior. Mientras que el Sol físico me ayuda a crear y a sostener la vida física en la Tierra, vuestra estrella me ayuda a evolucionar a nivel interno, a arraigarme en conciencia.


Para ofreceros una simple ilustración de este principio, pensad en lo que sucede cuando sostenéis una flor en la mano y la observáis con asombro y admiración. Veis la exquisita belleza de la flor; sentís su pureza, os maravilláis con los colores y disfrutáis de su aroma. La flor por sí misma no es consciente de su belleza; la flor simplemente está siendo ella misma. Pero debido a vuestra admiración, a vuestra presencia, a vuestra conciencia envolviendo a la flor, algo se despierta dentro de ella. Ella comenzará a experimentarse como algo hermoso y valioso. Ella disfruta de vuestra atención y una chispa de luz del alma se despierta en ella.


Observaréis que las plantas y las flores a las que prestáis atención conscientemente, simplemente disfrutándolas y cuidándolas, crecerán más abundantemente, tendrán más fuerza vital y desarrollarán raíces más fuertes hacia la tierra que aquellas a las que no ofrezcáis la misma dedicación. Sois creadores. Por medio de vuestros pensamientos, intenciones y vuestra propia conciencia sois capaces de agregar fuerza vital y poder creativo a la naturaleza viva en la Tierra. Esto es exactamente lo que la naturaleza anhela recibir de vosotros. Todos los reinos de la naturaleza buscan crecer en conciencia propia, extenderse hacia las estrellas, hacer la conexión y absorber hacia adentro la luz de las estrellas. 


Pensad en los animales que tenéis en vuestra casa, vuestras mascotas. Muchos de vosotros tenéis una conexión especial con ellos. Siempre que entabláis una relación íntima con un animal, recibís su amor incondicional y su fidelidad. Sin embargo el animal también recibe algo de vosotros. El animal es tocado por vuestra presencia humana, y por el tipo particular de conciencia que pertenece a los humanos. Vuestra presencia enciende una chispa de conciencia en su ser y le ayuda a avanzar en su evolución hacia una mayor conciencia propia.


Todo en el universo está creciendo y evolucionando hacia la propia conciencia. La conciencia lo lleva a uno más cerca del conocimiento de la propia divinidad, de la propia luz indestructible y del propio poder creativo. Todo en el universo gradualmente crece hacia un estado de conciencia en el cual comprende que Yo soy parte de Dios. Yo mismo soy un Creador. Celebrar vuestro divino poder creativo y manejarlo con responsabilidad es el propósito de la creación.
Vosotros sois creadores, y como almas habéis venido a la Tierra a aprender a abordar vuestros poderes creativos de un modo consciente y responsable. Como creadores, se espera que contribuyáis a mi evolución y a inspirar a los reinos de la naturaleza que a cambio os proveen de muchos servicios y bendiciones a nivel material y etérico. Cuando observan la condición actual del planeta, es difícil percibir que alguna vez hubo un propósito original de una cooperación mutua entre vosotros y el planeta.


Las cosas no han funcionado como se habían planeado y muchos dirían que las cosas han salido mal. Sin embargo en este momento yo os pido que recordéis vuestra excitación original al embarcaros en nuestra mutua aventura. Vuestra intención amorosa aún está viva dentro de vuestro corazón, incluso si notáis por todas partes que la humanidad ha utilizado sus poderes creativos imprudentemente y que debido a ello ha dañado a la Tierra. Uno podría decir que la humanidad ha cambiado su rumbo, ha tomado un desvío.


Originalmente, descendísteis a la Tierra desde una gran fuente de Luz, como un ángel niño. Érais inocentes y puros, pero a medida que vuestro viaje progresó también os ‘descarriásteis’. La humanidad llegó a un punto en el cual se resistió a cooperar con las fuerzas de la naturaleza, y en lugar de eso se opuso a la naturaleza. Entonces la humanidad perdió su conexión y raíces dentro de la totalidad mayor. Por miedo las personas buscaron ganar poder sobre los demás y sobre la naturaleza para asegurarse un lugar para ellos mismos en la Tierra. Uno podría decir que tuvo lugar una caída desde el Paraíso. Mientras que originalmente intentásteis servir a la vida en la Tierra, para nutrirla e inspirarla con vuestros poderes creativos, ahora experimentábais lo opuesto. En el presente observáis lo que sucede cuando la naturaleza ya no es reconocida como un socio viviente en la creación.


La falta de respeto de la humanidad por la naturaleza y el planeta a muchos de vosotros que leéis esto os entristece profundamente. También hay una tristeza en mí por todo lo que está sucediendo. Los reinos de la naturaleza, tanto animal, vegetal y mineral, han absorbido parte de la oscuridad y de la  negatividad esparcida por la humanidad. A su propio modo ellos han experimentado una sensación de abandono, un quiebre en la absoluta sensación de unidad que alguna vez hubo. 


Aún así, en mi verdadero corazón, hay perdurable amor y compasión por todos vosotros, y yo os pido que también sintáis compasión por vosotros mismos y por toda la humanidad. Estáis envueltos en un gran proceso de aprendizaje. En cualquier proceso de este tipo es inevitable que se cometan errores. Es parte de crecer y aprender que os embarquéis en desvíos y callejones sin salida.


En esta época la conciencia colectiva de la humanidad está cambiando. En estos días hay más y más personas que acarrean en sus corazones un recuerdo de la unión original entre el hombre y la naturaleza. Ellos tienen un conocimiento silencioso de la bendita y verdadera relación que los humanos son llevados a entablar conmigo, vuestro planeta hogar. Sentid otra vez cuán profundamente estáis conectados con mi ser.


Yo os amo tanto… Sois mis ángeles de luz y mi fe en vosotros no se ha marchitado. Yo os pido que me reconozcáis y que permitáis que mi energía se vuelque a través de vosotros nuevamente. Yo soy una compañera viviente caminando justo al lado vuestro en vuestro camino de encarnación en la Tierra. Al conectaros más íntimamente conmigo, al arraigaros más, vosotros traéis vuestra luz de las estrellas bien en lo profundo de la realidad material. Permitís que brille e irradie y eso traerá los cambios en la Tierra tan desesperadamente necesarios en este momento. Al conectaros conmigo desde el corazón, vuestro verdadero ser saldrá a la luz. Cada ser humano tiene una contribución única para hacer en esta gran aventura. Vuestros talentos únicos me inspiran, agregan fuerza vital a la naturaleza y también inspiran a otras personas.




¿Qué significa arraigarse?


Quisiera decir algo más sobre el significado de arraigarse. ¿Qué significa estar conectado a la Tierra, estar arraigado? Estar arraigado significa: estar presente en vuestro cuerpo, ser capaz de sentir vuestro cuerpo desde adentro, sentir el flujo de la vida en cada parte, desde la cabeza hasta la punta de los pies. Comprobad por vosotros mismos si podéis sentir este flujo. ¿Podéis simplemente sentir vuestra punta de los pies en este momento? ¿Pueden sentir la vida dentro de ellos?


Estar arraigado significa que ancláis vuestra luz de las estrellas, vuestra luz del alma, en lo profundo de la materia.  La parte del mundo material más cerca de vosotros es vuestro cuerpo. Las células y las moléculas de vuestro cuerpo están abiertas a recibir vuestra luz, vuestra alma. Sois el sol para vuestro propio cuerpo. Vuestra conciencia hace que vuestro cuerpo esté vivo y lo dota de poder sanador, fuerza de vida y vitalidad. El anclaje de vuestra alma dentro de vuestro cuerpo os da la fuerza para cumplir vuestros deseos más verdaderos en la vida. Cuanto más la ancléis dentro de vuestro cuerpo, más os encarnáis en la Tierra y creáis los cambios en vuestra vida que tanto anheláis.


Cuando estáis arraigados, os sentís claros y tranquilos. Estáis abiertos a vuestra inspiración del alma y al mismo tiempo estáis conectados con todo lo que sucede a vuestrso alrededor en la vida diaria. Hacer el puente entre el cosmos y la Tierra, sentir esa conexión, es lo que significa estar arraigado.


Muchos de vosotros portáis vuestra luz del alma en la mitad superior de vuestro cuerpo, alrededor de vuestro corazón y vuestra cabeza. Encontráis difícil hacer que realmente descienda hacia la parte más baja de vuestro cuerpo, abdomen, piernas y pies. Una razón por la que esto se percibe difícil para vosotros es el miedo a vuestra propia grandeza. Tenéis miedo de ser el ángel radiante y la estrella que sois y miedo a la responsabilidad que eso conlleva: marcar una diferencia en el mundo. Este miedo es viejo y vuestras raíces se extienden más allá de solamente esta vida. En el pasado, os encarnásteis en la Tierra muchas veces y a menudo os sentísteis mal recibidos. Todos vosotros estáis en el proceso de sanar este viejo dolor.


Yo os sugeriré dos maneras de arraigaros y sentir que en verdad sois bienvenidos en la Tierra, en vuestra grandeza, poder creativo y divinidad.




Arraigarse a través de la alegría


El primer modo es a través del deleite. Realmente no estáis acostumbrados a disfrutar. ¿Disfrutar de qué? os preguntáis…Pues de todo lo que podáis experimentar en la Tierra. Vuestro cuerpo ofrece muchas posibilidades para disfrutar, pero muchas de estas han sido consideradas pecaminosas o inferiores en vuestra cultura. Disfrutar los movimientos del cuerpo, el sol en vuestra piel, comer y beber, el cálido contacto con otro ser. Ser capaz de disfrutar esto tiene que ver con ser capaz de verdaderamente recibir. ¿Por qué esto es difícil para vosotros?


Muchos de vosotros sentís que algo está mal en vosotros, que de algún modo, en un nivel inconsciente, algo no está bien tal como sois. Sentís que tenéis que alcanzar metas, éxito o trabajar duro para recibir reconocimiento y apreciación. Ésta es una idea tonta, vista desde la perspectiva de la naturaleza. ¿Habéis visto ustedes alguna vez a un animal salvaje trabajar duro para ganar reconocimiento? Claro que no. El animal simplemente es y da por sentado su derecho a ser, no como una meta que deba plantearse o algo de lo que deba hacerse merecedor. El animal es capaz de disfrutar sin reservas el sol, el alimento, el baño de agua, las estaciones y los ritmos naturales de la vida.


Todos vosxotros están invitados a recibir y a experimentaros como un ser divino a quien se le permite recibir simplemente por ser quien es. Estáis invitados a gozar de las simples cosas que la vida en un cuerpo tiene para ofreceros. Recibir parece ser simple, pero no lo es. Requiere un nivel profundo de amor propio, un profundo reconocimiento y apreciación de quienes sois. Atreveos a alcanzar ese nivel de amor propio. Elegid un momento cada día en el que os preguntéis qué es lo que ahora podéis hacer por vosotros mismos que realmente os dé placer y os satisfaga. ¿Qué es lo que realmente os gusta tener o hacer? Entonces hacedlo. Hacedlo por vosotros, porque os honráis y porque estáis aquí en la Tierra para disfrutaros.


Cuando realmente disfrutáis, sea lo que sea, sin culparos o sentir vergüenza, entonces estáis arraigados. Estáis completamente presentes en el momento del ahora y todo está bien. No hay pensamientos del pasado o del futuro. Disfrutar es estar en el ahora, totalmente arraigado.




Arraigarse a través de la creatividad


Hay una segunda manera de volverse más firmemente conectados a la Tierra, más arraigados. Es el modo de la creatividad. Vosotros estáis hechos para esto. Cada humano tiene un anhelo natural de expresarse, de manifestarse en el mundo. Esto no tiene nada que ver con alcanzar fama o éxito en la sociedad. Más bien tiene que ver con encontrar un modo de expresarse que os dé una real satisfacción. Puede ser el caso que criar una familia os satisfaga profundamente, o que dirigir una compañía/empresa os inspire. Tal vez cuidar animales de alguna manera sea vuestro deseo del corazón, o puede ser alguna clase de expresión artística que sentís natural para vosotros. Cada alma anhela expresarse de alguna manera. En el momento en que respondéis a ese anhelo, os sentís satisfechos, realizados, como acostumbráis a decir. En el momento en que permitís que la creatividad interior natural se despliegue, sentís que “sí, este soy yo, éste es el modo en que mi energía quiere fluir”.


En ese momento vuestra alma se conecta con el corazón de la Tierra, el corazón de esta realidad. Es importante hallar lo que verdaderamente anheláis en vuestra vida y hacer espacio para el flujo creativo dentro de vosotros. Ahí es donde vuestra esencia divina toca la Tierra y encuentra forma material.


Ahora, quisiera inculcaros que vosotros realmente deberíais apoyaros más respecto a esto. Muchos de vosotros suprimís vuestros impulsos de hacer lo que vuestro corazón desea. Muy a menudo pensáis acerca de “cómo deberíais comportaros”, qué se espera de vosotros, vuestras obligaciones y responsabilidades. De ese modo no encontraréis la clave para desplegar vuestro poder creativo. Vuestro poder creativo os habla desde vuestro abdomen, desde vuestras entrañas. No está relacionado con todas las normas limitantes y obligaciones que habéis incorporado. ¡Liberáos de esto! Sentid la fuente de fuego y pasión que surge de vuestro abdomen y permitid que fluya libremente. Chispas de luz encontrarán su camino desde vuestro abdomen, hacia vuestro corazón, desde adentro hacia afuera, y os expresaréis de vuestro propio y original modo en la Tierra. Veréis que vuestra creatividad tocará a otras personas y que os hará sentiros alegres e inspirados. Seguir vuestra pasión y deseo tiene un efecto mucho más positivo en el mundo que virtuosamente hacer lo que os han dicho y os han forzado a cumplir con reglas y estructuras limitantes.


Este es un tiempo de cambio. Es tiempo de ser valiente y de tomar riesgos, de escuchar la voz de vuestro corazón y de actuar de acuerdo a él en todas las áreas de vuestra vida. Al rendirse realmente a vuestra guía del corazón, plantáis vuestras raíces en lo profundo de la Tierra y comienzáis a sentir que la vida aquí es realmente digna de ser vivida.




Ciclo completo


El primer modo de arraigaros fue disfrutar y recibir. Este es un flujo entrante. El segundo modo es un flujo saliente: crear y dar. Al crear desde el corazón, os dáis al mundo. Recibir y dar, disfrutar y crear, juntos cierran un círculo. Es un círculo de sanación.


Cuanto más os atrevéis a disfrutar y os halláis dignos de recibir, más os conectáis con vuestra inspiración natural, la energía que se espera que compartáis con este mundo. Y a medida que este flujo de inspiración se vuelve más fuerte y encuentra una forma creativa en el mundo, más disfrutáis el amor y la alegría que os sobrevendrá en vuestro camino. Los flujos de dar y recibir, crear y disfrutar, se refuerzan uno a otro mutuamente.


Yo, la Tierra, me beneficio con este círculo sanador de dar y recibir. En este círculo dinámico, fluido, yo estoy trabajando con vosotros. Es mi deseo nutrir y estimular vuestro poder creativo, esta chispa original en vosotros. Los seres humanos que han desarrollado la capacidad de disfrutar y de crear, entran naturalmente en una conexión diferente con la Tierra. Ellos serán conscientes de su grandeza, de su naturaleza divina, y por esa verdadera razón también comprenden que son sostenidos y conducidos por una fuerza de Vida que conecta a todos los seres juntos. Experimentar vuestra propia grandeza va de la mano con una sensación de pequeñez, la comprensión de vuestra incrustación en la gran red de vida que os sustenta. Los seres humanos que se honran y se respetan, naturalmente cooperan con su entorno vivo, otros seres humanos, animales, plantas, toda la naturaleza. Conocer vuestra grandeza va de la mano de reconocer vuestro lugar en la totalidad mayor, e infiere alegría por la parte que jugáis en ella.




Un viaje a la Nueva Tierra


Para ir terminando quisiera pedirlos que viajéis conmigo al futuro, a una nueva Tierra. Imaginad que la evolución en la que ahora estamos juntos ha progresado algunos pasos más adelante. Yo misma estoy evolucionando hacia una conciencia más expandida. Esta nueva conciencia ha sido despertada dentro de mí, incitada tanto por las épocas buenas como por las épocas malas en la Tierra. Me estoy volviendo más consciente y creativa en mi ser. Hay un anhelo en mi corazón por una realidad en la cual la humanidad y la Tierra restablecen su unión original de amor y de compañerismo. Una nueva Tierra en la cual nosotros cooperamos alegremente y yo soy nuevamente inspirada por vuestro amor y considerada atención, mientras yo os proveo con todo lo que necesitáis, viviendo en un cuerpo físico y sintonizados con el ritmo de la naturaleza.


Imaginad esta nueva Tierra que todos anheláis tanto, presentes en el momento del ahora. En nuestros corazones ya está viva, como una semilla. Nutramos esta semilla con conciencia y hagámosla brotar en nuestra imaginación. Observáos viviendo en esta nueva Tierra. ¿Qué es lo primero que notáis? Los seres humanos aquí estáis viviendo en armonía con la naturaleza. La tecnología es utilizada para sostener a la naturaleza más que para manipularla. Ved si podéis encontraros una casa en esta nueva Tierra. Hay un lugar y una comunidad ahí a la cual sentís que pertenecen. Permitan que vuestra imaginación os guíe y no sintáis restricciones. ¿Dónde vivís en esta nueva Tierra? ¿Podéis encontrar un ambiente natural en el cual os sintáis a gusto? Sentid el clima, sentid la simplicidad de la vida. La vida es pura y simple ahí, como se espera que sea.


Ahora échadle una mirada a la clase de trabajo que realizáis. Trabajo significa cualquier cosa que os inspire y que os dé una sensación de satisfacción. ¿Qué están haciendo? Probablemente viváis en una pequeña comunidad de espíritus afines y hagáis exactamente lo que vuestra alma os inspira a hacer. ¿Qué forma toma vuestra creatividad?


Cuando veáis o sintáis esto, sabed que vuestra alma os está hablando en el presente. Lo que estáis viendo es algo que añoráis hacer en este momento, y algo que podéis hacer en este momento, solamente si confiáis y os atrevéis a ser quiénes sois. Éste es el trabajo de vuestro corazón.


Ahora en esta imaginación de la nueva Tierra, sentid también qué es aquello con lo que realmente disfrutáis. Permitid que vuestro ojo interno os provea una situación en la cual verdaderamente os disfrutéis a vosotros mismos y recibáis algo de lo que la Tierra tiene para ofreceros. Permitid una imagen en vuestra mente de eso en lo que sois espontáneamente expertos. ¿Qué es lo que realmente os hace sentir: todo está bien y estoy contento?


Sentid el flujo de dar y recibir en este lugar, esta nueva realidad. Y sosteneos a eso cuando regresemos al presente.


La Tierra está en una etapa de transición y cuanto más la gente recuerde cuál es su inspiración, qué es lo que ellos tienen aquí para dar y recibir, más pronto la nueva Tierra se volverá una realidad. Sois vosotros quienes daréis nacimiento a esta realidad. Yo os agradezco por esto y hallo alegría en vuestra presencia.

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