Gabilondo el destripador

Sabias, aunque más comedidas de lo esperado por alguien de su talla, las palabras procedentes de un periodista con mayúscula.
Y sin embargo Iñaki Gabilondo no dice sino lo que es evidente a los ojos de todos. Igual que el niño que abiertamente dice, relato el traje nuevo del emperador, de Hans Christian Andersen, que el emperador va desnudo, Gabilondo, acostumbrado a tomar el pulso a la sociedad, hace un certero diagnóstico del gran cuadro de la política en España. Un diagnóstico que no es otro que el aplicable al mundo entero. Los políticos de este país están más ocupados en agarrarse a sus cargos (y a sus astronómicos sueldos) que en 'servir' a los votantes. Y es que no hay más cera que la que arde. Son hasta dignos de compasión.

Buscar culpables y criticar, ese deporte al que somos tan aficionados los humanos, nunca ha servido de nada más que para meter más leña a la hoguera del resentimiento colectivo de una sociedad acostumbrada a vivir en una montaña rusa, donde altos y bajos se han sucedido sin que las personas lo podamos comprender. Dictaduras, repúblicas, monarquías, democracia, reglas –a fin de cuentas– que hemos aceptado los humanos a lo largo de la historia. Los corderos nos hemos sentimos seguros mientras ha existido un pastor convencido de su papel (religión) apoyado por su fiel perro (gobernantes-medios de comunicación) que los apacente y los proteja o advierta de las inclemencias (destino) y de los lobos (los riesgos de osar mirar afuera del cercado).

Durante milenios este patrón de vida se ha perpetuado. Las civilizaciones e imperios conocidos y registrados por los anales de la humanidad –redactados ya sea por escribas egipcios, monjes medievales, o agencias de información contemporáneas– han surgido y desaparecido cíclicamente. Y sin embargo la pirámide jerárquica –más o menos maquillada por eventos (revoluciones) o por elementos (sindicatos obreros, democracia)– ha conseguido perpetuarse, indemne al discurrir del río de la vida, por la sencilla razón de que desde el promontorio que supone la cúspide de la pirámide (sociedades secretas) se tiene una perspectiva más amplia de los acontecimientos, y se observan y dominan los cuatro puntos cardinales.

Siempre me pregunté cómo podía ser que a George Herbert Walker Bush (el padre) le acabase sucediendo su propio hijo en la Casa Blanca, cuando se supone que la presidencia de una república se decide en las urnas y que para llegar a ser aspirante a ese cargo hay que reunir unas cualidades admirables y talentos especiales que nada tiene que ver con la transmisión de los genes. Igual que para conseguir montar exitosamente un mueble de IKEA, me llevó un tiempo comprender que el presidente de los Estados Unidos, o el de la República Francesa, por ejemplo, ostentan el cargo de jefes de Estado en la misma medida que los reyes de muchos países. Y éstos, sí se transmiten la jefatura de padres a hijos. ¿Mismo cargo, distintos procedimientos?

Los medios de masas insisten en percutir en los levantamientos 'espontáneos' que como piezas de dominó, están cayendo una tras otra en países de órbita islámica. Personas que inesperadamente se autoinmolan, a lo que siguen convocatorias de manifestaciones que en la mayoría de los casos están siendo reprimidas brutalmente por la policía o ejército. Y nadie presta atención a lo que está pasando en el estado de Wisconsin, donde está teniendo lugar un levantamiento popular por parte de estudiantes, profesores, pensionistas,etc. contra lo que los agentes sociales (sindicatos), históricamente y afianzadamente establecidos allí –y muy respetados por el pueblo, a diferencia de aquí–, califican de flagrante actitud dicatorial por parte de su gobernador Scott Walker, llegándosele a comparar con el mismo Hosni Mubarak. Los medios y la televisión de nuestro país están haciendo caso omiso de esta noticia, así como de la devaluación vertiginosa que el dólar está sufriendo, causada por la hiperinflación de esa moneda. Todo ellos está conduciendo a que países dependientes del dolar como divisa de referencia (Egipto, etc…) estén viéndose enfrentados a la realidad de tener que vivir con dos dólares al día.

Finalmente está revelándose lo que gran parte de los ciudadanos norteamericanos ignoraban y que están contemplando atónitos: que existe un plan para desmantelar las libertades en su propio país. Las manifestaciones se están extendiendo a otros estados (Tenessee, Indiana…). Por de pronto, en Wisconsin está a punto de ser recabada la intervención de la guardia nacional para controlar los disturbios. Ver para creer…



Iñaki Gabilondo está en la calle por haber despertado a una realidad que el 90% de la población no quiere ver. Se ha convertido en un peligro para los perros del pastor, pues su deriva como periodista ha conducido a que mucha gente aborregada empiece a hacerse preguntas incómodas para el sistema y que se resumen en una cuestión de fondo:

· ¿Hay una misma mano negra detrás de los diversos poderes gobiernos (ejecutivo), parlamento (legislativo), jueces (judicial), sindicatos, patronales, ONGs, medios de comunicación, corporaciones monopolísticas, banca y en resumen cualquier figura o entidad de dominio y alcance general, sospechosamente impulsados y patrocinados por ostentosas e ingeniosas campañas de publicidad?

Los acontecimientos se están precipitando, por mucho que Berlusconi insista en meternos con calzador a la manipulada Belén Esteban y demás frikies (a su pesar) que pueblan el imaginario popular.

Primero te ignorarán,

luego te ridiculizarán,

si eso no basta te combatirán,

y como no hallarán al contendiente que esperan en ti

…entonces ganarás

- Ghandi

Un consejo (si lo aceptas): si sientes que todo esta información, y la que te llegue por otros medios, te provoca emociones evidentes e irreprimibles (miedo, sorpresa, tristeza, repulsión, enojo, enfado…) es que estás viv@. Enhorabuena!. Acéptalas y manifiéstalas (llora, grita…) en un lugar adecuado: un cuarto acústicamente aislado en casa (para que no se enteren los vecinos y puedan cuchichear), con un terapeuta emocional experto (capaz de 'estar' sin perturbarse) o en un campo de fútbol, mezclado entre los aficionados que estén haciendo lo mismo que tu (aunque sin darse cuenta). Sacúdete ya los malos rollos (bajas vibraciones) para que los acontecimientos que están por desencadenarse, no te pillen embroncado, sino en paz contigo mismo.

Nada puedes hacer para detener lo que está pasando en el mundo. Pero sí puedes hacer algo por tu propia vida (y quizá la de los que quieran imitarte en tu entorno más cercano). Tu responsabilidad básica para contigo mismo y para con el resto de la humanidad, como parte indisoluble que eres de ella, consiste en desapegarte de todas tu adicciones (las conocidas y las no detectadas) y desprenderte de la mayoría de los paradigmas y pensamientos (creencias) que has incorporado del inconsciente colectivo. Dejarás efectivamente de juzgar y de tratar de buscar culpables en los demás (incluso en ti mism@)–eso tan feo que aprendiste de pequeñ@. Tu despertar al consciente 'batir de alas de mariposa' conducirá a generar un efecto sanador allá donde menos lo imagines.

"La verdad os hará libres"

"Bienaventurados los pacíficos porque heredaréis el reino de los cielos"

Ala, ya lo he dicho.