Buscar este blog

jueves, 15 de septiembre de 2011

realidad vs. ficción




"Nada es falso o mentira, todo es del color del cristal con que se mira", es una cita atribuida a William Shakespeare (1564-1616)

"…there is nothing either good or 
bad, but thinking makes it so."
"…del cristal con que se mira',
En 1249 el filósofo inglés Roger Bacon formuló la primera afirmación acerca del uso de lentes para mejorar la visión. Sin embargo, posiblemente ya en el siglo X, los chinos habían utilizado lentes de aumento colocadas en molduras. En Europa, las gafas se utilizaron por primera vez en Italia inventadas por el florentino Salvino Degli Armati (m. 1357) hacia 1285, y algunos retratos medievales representan personas que portaban gafas.
Los primeros anteojos, probablemente monóculos, se hicieron tallados en berilo, y tenían lentes convexas, destinadas a las personas ancianas que tenían dificultades para ver de cerca. En 1451, el erudito alemán Nicolás de Cusa (1401-1464) propuso el empleo de lentes cóncavas, más delgadas en el centro que en los bordes, a fin de ver de lejos. Estas lentes se destinaron a los ojos miopes []


Shakespeare da, pues, por sentado que nuestro sentido físico de la vista es una especie de dispositivo similar a un cristal/lente y que tales sean las características con que 'dotemos' a ese cristal (color, grosor, etc.) así percibiremos, es decir nos haremos una idea acerca de eso que llamamos el mundo externo. Y así, consecuentemente lo 'creemos'. Creemos que el mundo externo es objetivamente real y aquí nace el problema. ¿Cuál es el origen de esta "creencia"?
Los idealistas objetivos de la escuela platónica, como Spinoza afirmaban que no existe un mundo externo autónomo. 
Para Spinoza, la substancia es la realidad, que es causa de sí misma y a la vez de todas las cosas; que existe por sí misma y es productora de toda la realidad; por tanto, la naturaleza es equivalente a Dios. Dios y el mundo, su producción, son entonces idénticos. Todos los objetos físicos son los "modos" de Dios contenidos en el atributo extensión. Del mismo modo, todas las ideas son los "modos" de Dios contenidas en el atributo pensamiento. Las cosas o modos son naturaleza naturada, mientras que la única substancia o Dios es naturaleza naturante. Las cosas o modos son finitas, mientras que Dios es de naturaleza infinita y existencia necesaria y eterna.
Tenemos ojos, orejas con las que 'oir', terminaciones nerviosas con las que 'tocar' y 'gustar', narices a través de la que 'oler'…pero según la visión de Spinoza todo eso son modos finitos.
'En realidad' es una expresión que curiosa y comúnmente utilizamos para aclarar que algo ha sido malinterpretado (percibido erróneamente) por alguien. Decimos 'La realidad es que…', 'Lo cierto es que…', 'la verdad es que…'. Nuestro subconsciente está plagado de  lapsus linguae, esos errores o tropiezos involuntarios e inconscientes al hablar que revelan niveles de comprensión no conscientes.

Realidad…ficción…Reflexiona un poco y permítete abandonarte al vértigo que implica esta dicotomía. ¿Es posible que lo que crees que es real, no se sino una ficción? ¿Es posible que estés dormid@, soñando un sueño? ¿Y si la vigilia fuese un estado que requiriese de ti un verdadero 'despertar'?

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Si lo deseas puedes compartir algún comentario...