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miércoles, 11 de enero de 2012

George Kavassilas (I)


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Antes de la pregunta que Miguel Celades le hace a George sobre su condición de 'contactado', es necesario profundizar y matizar algo más acerca de la respuesta que da el mismo entrevistado a la pregunta que Carles, el conductor del programa, hace en el min.12:04:
"¿Cómo puedes ser que nosotros 'Humanos', en principio –y tal como afirmas– Seres Divinos, seamos capaces de 'caer tan bajos en muchos aspectos', de estar enfrascados en continuas guerras y disputas…niños que mueren, asesinatos, violaciones? Pareciera que en vez de ir hacia la luz, estamos hundíéndonos más en la oscuridad.
Es una pregunta fantástica, dice George. Comprender la estructura del Universo es lo que da respuesta al aparente caos que estamos experimentando. Este Universo está hecho de luz y la luz se transmite como ondas, y consecuentemente se trata de un universo dualístico 


Llegados a este punto es  interesante meter una 'cuña cientificista' y aclarar –por obvio que parezca– la naturaleza de la luz desde la polaridad magnética: polo positivo y negativo, sin los que la luz es inviable. Es pues necesaria la polaridad para que la vida en 'este' universo…
Esto significa que no solo la Tierra 'funciona' desde la polaridad sino los demás planetas de nuestro sistema solar e incluso otros sistemas solares y galaxias dentro de este universo, uno de los múltiples universos que existen (han sido creados y siguen creándose…) dentro del multiverso.

Hecha esta aclaración, y respondiendo a la pregunta, para comprender las razones de la violencia y beligerancia que domina la dinámica de interactividad en este mundo, es necesario decir que la violencia, el secretismo y todo el abanico de emociones han estado campando a sus anchas hasta ahora. La vida en este mundo ha sido, desde que el homo sapiens aparece en escena, como una olla a presión cuya válvula de escape periódicamente ha sido liberada, por medio de batallas, revoluciones, y más recientemente por procesos hiperinflacionarios y deflacionarios, todo ello manipulado a su conveniencia desde la cúspide de la pirámide jerérquica de este mundo dominado por la mente izquierdocerebral.
Los acontecimientos aparentemente dramáticos que estamos presenciando en este momento particular (y glorioso!) de la historia de la humanidad, responden no al inicio de una ´caída' en la oscuridad, sino al fin de ella, al ocaso del periodo de vigencia de la dualidad. En otras palabras, nuestras consciencias están despertando a la realidad de nuestra esencia, desprovista de necesidad de pelear, de combatir, de utilizar el enfrentamiento para dirimir las situaciones dolorosas. Estamos aprendiendo que el dolor enseña y no mata. Reprimirlo es lo que aniquila. La tan cacareada segunda venida mesiánica la constituimos todos los que nos hemos comprometido a anclar la luz definitivamente en este planeta. El caos que la humanidad está experimentando ahora (y cuyas evidencias van a verse aceleradas en adelante) es la consecuencia de la resistencia que las fuerzas represoras dominantes (hermanos de la oscuridad) están ejerciendo para tratar de impedir que lo inevitable tenga lugar: el fin del statu quo de dominio/represión, sometimiento/esclavitud. 
Tenemos por una parte a las fuerzas que optaron por adherirse al 'bando' represor (y en ese grupo no solo están englobados los evidentes pastores: Illuminati-Bilderberg-CFR-Trillateral Commission-Thule society-Cabal-Vaticano-Jesuitas, etc., sino las energías represoras que todos albergamos y manipulamos desde nuestros egos /demiurgos) están tratando por cualquier medio de mantener su hegemonía, incapaces de momento de dejar caer por su propio peso su anquilosada máscara, la imperativa necesidad de seguir interpretando el papel de pastores del rebaño, ese papel que les fue asignado cuando los dioses de la antigüedad abandonaron el escenario que habían armado. Adictos por fuerza de la costumbre a ejercer un rol paternalista que implica inevitablemente someter a otro más débil y sumiso (corderos).
Por otra está la energía de los oprimidos, una fuerza que está presenciando con toda (e inevitable) crudeza, la caída del velo de la ilusión, el descalabro de un sistema que creían inquebrantable y al que se habían habituado (a pesar de haber tratado de derribarlo) clama ahora venganza por medio de la legítima indignación ante la desmedida corrupción que los medios están haciendo pública. 
Ambos 'bandos', antitéticos en apariencia, obcecados en exacerbar sus aparentes dicotomías, van a acabar teniendo que aceptar la única realidad existente: que el origen de la beligerancia y violencia imperante en la Tierra está arraigada en lo que fue nuestra voluntaria decisión, como Seres de Luz eternos e inmutables, de experimentar en toda su intensidad la polaridad/dualidad (bueno-malo, si-no, día-noche, justo-injusto, frio-calor, placer-dolor, izquierda-derecha, arriba-abajo, conservadurismo-progresismo, etc…) Haber optado voluntariamente  por probar esta experiencia de vivir los opuestos, se sustenta en el hecho de que nuestra esencia es eterna e inmutable, independientemente de todas esas transitorias contingencias. Estamos en esencia por encima del bien y del mal, por encima de los opuestos, y en el momento de que tomamos consciencia de que hemos estado actuando en este teatro que es el mundo físico-material, la ilusión se desvanece, despojada de cualquier necesidad de seguir actuando. 

Hemos en definitiva estado viniendo a este dominio de alta densidad (baja frecuencia vibratoria lumínica) voluntariamente a hacer una excursión donde explorar este universo y experimentar los niveles profundos de la Creación. Esta decisión tenía implícita una condición de la que éramos conscientes (!) en el momento de tomarla: la AMNESIA auto-consentida/aceptada. Es decir, procedemos originariamente de una realidad donde, liberados del peso de un cuerpo físico denso como éste –con un neocórtex extralimitado en sus funciones– la mente (superconsciencia) no precisa ya del frenético y caótico secretario (ego-metteur-en- scene) encargado de mantenernos perpetuamente enfrascados en escenas imposibles, fabricando esas múltiples facetas/personalidades que hemos exhibido en virtud de las circunstancias que este incomprensible mundo precisase. 
No hay ya olvido. Experimentar el olvido de haber salido de CASA, nos ha empujado a tratar de recordar de donde procedemos. Desde que tomamos esta decisión voluntaria, nos vemos expuestos al reto de hallar el CAMINO de vuelta a CASA. Un camino ciertamente largo y tortuoso en la medida de la amnésica y arrogante ignorancia que nuestros egos han exhibido respecto de las leyes naturales, poniendo constantes trabas a la liberación del Ser interno que todos albergamos. 
Por otra parte, la experiencia dualística experimentada en un contexto de amnesia implícita conlleva tener que afrontar la emoción del 'abandono cósmico'. Los estallidos de ira por no comprender ni hallar el sentido al confuso y aniquilante entramado de conspiraciones, manipulaciones y demás actos de mala fe de que fuimos (y continuamos siendo) objeto, y que aprendemos a repercutir a modo de inconsciente venganza hacia las personas involucradas en situaciones que percibimos como amenazantes) emergen cada vez que sentimos que procedemos de 'otro sitio'. 

Todos sentimos (unos más temprano, otros más tarde) que no 'encajamos' aquí, que esto no es nuestra casa…LaDoctora Elizabeth Kübler-Ross habla de sus pacientes terminales. Todos sin excepción expresan, instantes previos a expirar, la convicción de que 'regresan a casa'. llegado el momento de la 'partida' se relajan las facciones de fallecido, producto del abandono de la resistencia a sufrir, reflejada en las tensiones corporales. 
Es ese 'regresar a casa' lo que todos anhelamos, y se produce cíclicamente al concluir cada periplo vital (encarnaciones). La cuestión es que ese ciclo debe repetirse en la medida que la naturaleza de la experiencia no ha sido COMPRENDIDA. ¿Por qué? 

EL KARMA

Todos nos lamentamos de las situaciones de tensión que la vida parece querer presentarnos: tensión entre hijos-padres, emopleados-empresarios, súbditos-monarcas, fieles-iglesias, creencias, YIN-YAN, mujeres-hombres, mentalidades enfrentadas, opuestas, polarizadas porque están gestionadas desde la dualidad que en el plano físico de este mundo se manifiesta en los dos hemisferios cerebrales que rigen de un lado el pragmatismo cientificista y del otro la intuición emotiva. El enfrentamiento entre ambas 'facciones' ha sido lo que nos ha mantenido sumidos en la 'oscuridad'. En esencia, fuimos sujetos a un parto voluntario tras el que nos vimos obligados a lidiar con la frustración de no comprender, de este lado de la 'barrera', lo que valientemente aceptamos experimentar mediante una decisión que se tomó desde el 'otro' lado de la barrera. No obstante el concepto de barrera es irreal, no existe sino en nuestra mente. La convicción de que estamos aislados, abandonados está anclada en ese dolor, esa herida que no sabemos cómo suturar, como coser. Como consecuencia tratamos de 'disimular', 'reprimir' el dolor, por medio de ideas, conceptos y argumentos intelectuales. Pero muchos se preguntarán, ¿cuándo sucedió esto a nivel terrenal? Porque para experimentar la vida en este mundo material, hay que estar precisamente materializado, encarnado ¿qué sucedió, y cómo, para que el acceso a este nivel de experiencia, a este 'juego de rol' que en definitiva es esta ficción en la que estamos enfrascados y de la que tanto aparentemente cuesta salir? Sabios de todas las épocas han tratado de explicarlo con sus propios métodos. Fueron Seres, 'hermanos mayores' que aterrizaron, igual como nosotros hemos hecho también, para ayudarnos a despertar de la 'caverna' ilusoria de la que creemos ser prisioneros. Zaratustra, Jesucristo, Krsna, Quetzalcoatl, trataron de explicarnos con metáforas, con parábolas algo que AHORA (gracias a ellos y otros muchos) se está revelando más fácilmente comprensible. Nosotros y nuestros hijos estamos viniendo para celebrar una gran fiesta, la de la confraternización, la fiesta de la caída del muro de la ignorancia, el velo de Isis (Maya para la civilización Hindú). No es oscuridad lo que está viniendo. Lo que estamos presenciando es precisamente es el efecto que la luz produce en los ojos cuando VEN lo que antes no eran sino las sombras de una habitación sumida en la oscuridad. La violencia ha existido desde que decidimos que 'quien da primero da dos veces', desde que creímos que el hombre era un lobo para el hombre. La violencia, la guerra la sumisión, el sometimiento es precisamente lo que ha imperado hasta ahora. Simplemente fue reprimido, ocultado, mantenidas en secreto todas las violaciones de derechos bajo la cortina de la vergüenza. Nos hemos agredido repetidamente, vida tras vida, interpretando alternativamente papeles de agresor y agredido, sumidos así en la necesaria rueda del karma, donde como un boomerang, todo lo que se recibe se da. Revestidos de una entidad ficticia a la que los Freud y Jung bautizaron como Egos, nos ataviamos con una armadura con la que defendernos del abandono cósmico, un abandono que hemos ejecutado al nivel humano y transferido de padres a hijos. Claro, ¿cómo va a dar el necesario consuelo a un recién nacido un padre o madre que no entiende el sentido de la vida? Y sin embargo todos SABEMOS en un nivel profundo cuál es el sentido de la vida. Todos somos buenos, decía Rousseau. Es la sociedad la que corrompe. Y ¿quien es la sociedad sino un compendio de nuestras individualidades? La sociedad somos todos. El sistema lo conformamos todos y todos somos parte indisoluble de su mecanismo. Es la creencia de que el sistema está fuera de nosotros, la ancestral sensación de que estamos marginados de algo que se cuece en una cocina gloriosa y de cuyos manjares somos permanentemente privados. Esa creencia de no ser válidos, de no haber hecho lo suficiente para merecer estar a la mesa de la abundancia, está arraigada profundamente en una realidad física: fuimos abandonados.

HOMO SAPIENS

Los primeros homínidos aparecen el la Tierra hace alrededor de un millón de años. Su capacidad craneal es notablemente inferior a la que despliega súbitamente el etiquetado como 'Homo Sapiens', un ser que de golpe aparece para interrumpir la linea genética –cuyo lento curso debía haber continuado aún hoy– y brindar a una rama de los homínidos un salto genético ante el que Darwin tuvo que claudicar. Este nuevo Hombre, dotado de un Neocortex, la capa más externa del hemisferio izquierdo cerebral, tiene capacidad para 'pensar' por si mismo, capaz de ser instruido en labores precisas, a fijar la atención y obedecer órdenes, capacidad de la que hasta entonces carecía, pues estaba regido por el imperante sistema límbico que gobierna el hipotálamo, el hipocampo, es decir el dominio de los instintos, la memoria emocional.
¿Qué o quien operó ese salto genético? ¿Quién tuvo la capacidad de 'crear' a un nuevo hombre? Zachariah Sitchin, en su serie 'Crónicas de la Tierra' ofrece una pincelada de lo que los registros cuneiformes hallados en Mesopotamia a finales del siglo XIX mencionaban. La civilización transmisora de los registros de la Tierra más antiguos de los que se tiene conocimiento fue la Sumeria. La epopeya de la creación registrada por los babilonios, se titula Enuma Elish que significa "Cuando los cielos y las tierras aún no se habían creado…") ofrece información clara y concisa acerca del origen de la vida en este planeta y sistema solar. Las crónicas babilonicas, guardadas inicialmente en los sótanos del British Museum, mencionan que la responsabilidad de dicho salto cualitativo genético que testimonió ese primitivo homínido, fue obra de 'aquellos que del cielo a la Tierra vinieron' (eso es lo que significa el término sumerjo 'Anunnaki'). Las razones de dicha intervención genética puedes descubrirlas si estás interesado/a en ello leyendo la serie 'Crónicas de la Tierra' del politólogo y periodista Zacharia Sitchin. Lo que verdaderamente tiene relevancia respecto a nuestra vida actual es algo que tiene que ver con la vinculación entre lo creado y su creador, entre la obra y el artista. Entre el esclavo y el dueño, entre el secuestrador y el rehén. Pero obtener una capacidad cerebral mayor con la que gestionar una consciencia más amplia de la propia existencia también tuvo su lado oscuro…la esclavitud y dependencia del cerebro izquierdo, la adicción a pensar, premio y a la vez último obstáculo (en virtud del desmedido uso que se ha hecho de él) que el Ser Humano debe soslayar para poder abrazar la fantástica realidad que le espera a la vuelta de la esquina y que fue vaticinada por los mayas y otros pueblos indígenas, miles de años atrás.

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