De entrada decirte que mi intención no es encenderte el ánimo gratuitamente con estas imágenes. Estoy tan consternado como lo estás tú.
Hay gente en este planeta capaz de realizar los más aberrantes actos sin pestañear y sin el más mínimo rubor. Pero por terribles que sea estos actos, caer en la tentación de juzgar los acontecimientos externos del mundo es tan solo comparable al enfado que experimentamos cuando, mirándonos al espejo, nos ofuscamos por la imagen reflejada que el mismo nos devuelve.
Emitir una queja al gobierno chino (o a cualquier gobierno) por cualquiera de las atrocidades que se cometen en el mundo y de las que, gracias a los avances tecnológicos nos estamos enterando, es simple y llanamente malgastar tu energía. Eso es justamente lo que pretenden quienes publican, y difunden, imágenes de este calibre (con la políticamente correcta intención de mantenerte informado de todo lo que acontece en el mundo). Servirte en bandeja las calamidades y no ayudarte a gestionar el impacto que dichas imágenes te producen es una canallada. Pero tranquilo que aquí estoy yo para echarte un cable al respecto. No te abandonaré a tu suerte sumido/a en tu consternación.
Cabrearte y cargar contra quien sea, está demostrado que no produce ningún resultado (eres, con todos los respetos, un iluso si piensas lo contrario). La costumbre ancestral de deshacerse de las niñas al nacer es un comportamiento muy arraigado en el subconsciente colectivo de muchos países orientales de la órbita comunista –no solo de China– desde que el Budismo fue sustituido por el Maoísmo. Una costumbre ancestral que no va a sufrir la más mímima variación porque la opinión pública occidental decida juzgarla. Probablemente esa queja tenga el efecto contrario y, en todo caso, si algo ha de cambiar, ese cambio surgirá desde dentro, nunca desde la presión que nadie (gobiernos o individuos) pueda ejercer externamente.
Si 'tomas partido' y decides juzgar como 'malo de la película' al pueblo o al gobierno chino, quizá deberías saber que la eugenesia está siendo implantada y aceptada de forma sistemática también en occidente. Solo que de forma más 'aséptica', vía legislación votada en los parlamentos por los políticos a los que tú has delegado el poder de representarte. ¿Qué nos diferencia de los chinos? ¿qué no nos comemos a los fetos abortados? Quizá debas reflexionar acerca de tu grado de responsabilidad.
Desear ayudar a construir un mundo más amoroso es muy loable y habla bien de quien tiene ese anhelo. Y estoy convencido de que, si has leído hasta aquí, en cierto modo, eres una de esas personas. En tal caso, quizá consideres más constructivo operar un cambio en tu perspectiva acerca de cómo conseguir ese objetivo.
NO JUZGUES (a menos que quieras ser juzgado)
De entrada convendría que asimilaras que el mundo es el que es porque TODOS, por acción o por omisión, hemos colaborado en ello. Ello no es ni malo ni bueno. Simplemente es. Actuamos en la medida que se produce el despertar de nuestra conciencia.
Quizá puedas revisar tu óptica y modificar tus actuales esquemas mentales acerca de cómo vivir en una sociedad más amorosa.
¿Y si resultase que de lo que verdaderamente se trata, no es ya de cambiar el mundo –y a todos aquellos que insisten en hacer de él un lugar tan sórdido– sino de CAMBIAR UNO MISMO?
¿pero, cambiar qué? dirás quizá…
Al Igual que muchos decidimos hacer periódicamente limpieza de nuestros intestinos para evitar que se acumule porquería en ellos, quizá también sea conveniente limpiar la mente de todos esos 'residuos tóxicos' que, acumulados en nuestro baúl mental, sin haber sido correctamente asimilados, 'atascan' nuestro desarrollo emocional y con ello nuestro potencial de disfrute de la vida e interacción con los demás. Ser lo suficientemente humilde (y a la vez valiente!) como para hacer periódica revisión interna de las actitudes propias para con uno mismo y nuestro entorno y girar el calcetín de los paradigmas mentales heredados (y que repetimos como loros sin cuestionárnoslos simplemente porque así se ha hecho siempre), es muy posible que sea el verdadero camino para reconfigurar nuestro 'sistema operativo'.
Verás, quienes provocan las guerra no aceptarán nunca que les hace falta esta terapia revisionista para liberarse de la esclavitud de la tiranía. Es más, es probable que Bernanke, Geitner, Rockefeller y todos aquellos que ostentan el verdadero poder del mundo se sientan tan cómodos en su sillón del poder que hayan decidido que regir los destinos de 'la plebe' es algo a lo que no pretenden renunciar en absoluto (por eso los cargos políticos pasan de padres a hijos, de padrinos a ahijados, etc).
Quizá tú seas uno de esos que escogieron venir a este mundo a traer un soplo de aire fresco y a despertar a tus hermanos del sueño en el que están sumidos. Si tienes ese vago recuerdo convendrás en que el verdadero cambio solo es operable desde el interior de cada uno.
Todos sabemos que los niños aprenden por imitación. Nada de lo que les digamos que deben hacer va a tener la menor repercusión, salvo que decidan justamente hacer lo contrario para rebelarse contra la norma que tratamos de imponerles. Sin embargo los niños persisten obstinadamente hasta los 7 años (cuando renuevan su dentadura) en repetir TODO aquello que ven que los adultos hacemos – algo que, desgraciadamente, por norma general NADA tiene que ver con lo que predicamos dialécticamente (he aquí una de las causas de tanto caos en el mundo)
Si puedes recuperar tu consciencia y 'domar tus pensamientos', estarás literalmente cambiando el mundo porque tus acciones estarán, recuerda, en SINTONIA con tus pensamientos, y éstos son siempre e inevitablemente la madre de todas tus acciones, las que lo quieras o no tienen una repercusión en tu entorno o área de influencia más próxima. Más te vale, por tanto, ser consciente de tus pensamientos, de lo contrario el efecto de tus acciones puede ser devastador.
Si propagas el 'virus' de la Consciencia, estás haciendo más por el Mundo que tan injusto te parece ahora, que si canalizas tu frustración emitiendo tu queja al gobierno chino. Ellos, los desviados manipuladores de esta ilusión, cambiarán un día. A su debido tiempo. No te atribuyas la potestad para decidir cuándo les toca cambiar. La cuestión aquí es ¿estás tú listo para cambiar AHORA y aportar tu grano de arena? ¿Estás listo para aceptar tu responsabilidad?
Canaliza la frustración que te produce ver estas y tantas otras imágenes, hacia tu ámbito de realidad más cercana. Revisa todas esas situaciones que te afectan en tu entorno más íntimo hasta poco a poco ir 'conectando' con los miedos más profundos y atávicos anclados en ese baúl de recuerdos inconfesables, aquellos de los que indefectiblemente se nutren tus pensamientos.
Existen muchos métodos que apuntan a la misma raíz de la confusión, los traumas de infancia (incluso de vidas pasadas): Eneagrama, S.A.T., Rebirthing, Gestalt, Primal Scream, Constelaciones…
Todos ellos aportan su grano de arena en la tarea revisionista. Simplemente asegúrate de que las personas que traten de ayudarte no estén, ellas mismas, dominadas por sus egos, esas personalidades que todos llevamos dentro y que sacamos a escena en función de las necesidades que las circunstancias exijan (el servil, la prostituta, el predicador –yo tengo algo de ese, sin duda– el 'pobre de mi', el dictador/dominador…etc).
Pero ¿qué tiene todo esto que ver con HOYxTI? os preguntaréis.
Dar es amar. Esa es la clave para el cambio. ALL YOU NEED IS LOVE cantaba John Lennon (básicamente ese fue el argumento que originó su asesinato). Como a tantos otros que trataron de predicar que lo único que necesitamos es amarnos y dejar de juzgarnos.
Por eso creé HOYxTI. No para ofrecer un mercado alternativo al sistema económico imperante. Para eso ya están otros 'bancos de tiempo' (más populares, por cierto, que el nuestro). No, HOYxTI no nació para servir de plataforma a quien quisiera actuar desde una óptica anti-sistema, sino para brindar a quien estuviese en el camino de la salvación personal interna, a aquellos que son conscientes de que el grifo con el que se abre (y cierra) el canal de la abundancia universal está dentro de ellos, el cauce para poder ofrecer su más genuina actitud de generosidad. HOYxTI nació para convertirse en un 'campo válido de experimentación' donde cada cual pudiese llevar a la práctica sus logros teóricos en el terreno de la liberación de la esclavitud mental, donde poder DAR y disfrutar haciéndolo. Y no para ahorrarse el dinero que costaría pagar a alguien, por solicitar los servicios de un masajista, sino con la finalidad de experimentar qué se siente y qué efectos se provocan ofreciendo y recibiendo favores sin sentir escrutada nuestra solvencia económica, sin mirarnos la cartera atemorizados por si nos podemos permitirnos o no pagar los 20 euros que cuesta dicho masaje, o si, por el contrario, voy a saber tasar adecuadamente –sin sobrevalorarme o infravalorarme– esas habilidades que tanto disfruto realizar en mi tiempo libre y que podrían interesar a alguien.
Sé que lo que digo es incómodo para el ego de todos los manipuladores del mundo (qué tire la primera piedra el que esté libre de culpa), el mío y el tuyo, el mismo que quizá trate de persuadirte (esa es su tarea) de que todo esto son argumentos estúpidos y que lo que hay que hacer es dejarse de filosofía barata y salir a las barricadas y acabar con todos los corruptos que hay en el mundo (aunque quizá te acabes conformando finalmente con denunciar a los chavales que pintan graffiti en las paredes o hacen ruido abajo en la calle con sus motos, para a continuación regresar a la desgraciada rutina diaria. Y todo porque, a fin de cuentas, hay que pagar la hipoteca, el cole de los niños,…seguir sobreviviendo en definitiva, a la espera que aciertes una quiniela o te toque el gordo de navidad.
Aunque quizá seas de aquellos que se creen convencidos que hacer las cosas bien consiste en seguir el evangelio de 'El Secreto', ese libro que predica básicamente que debes liberar las cadenas que te esclavizan e ir en pos de todas esas metas que siempre deseaste alcanzar (pero que tus particulares circunstancias no te permitieron). Si este es el caso, lamento desilusionarte porque esas metas solo responderán a los deseos de tu ego, no a los verdaderos anhelos de tu corazón, que continua, mal que te pese, oculto en su gruta, esperando que acudas a su rescate. Acallar tu dictador interno tiene como finalidad escuchar a la tenue voz de tu corazón, a ese niño/niña interno y a toda su retahila de sentimientos heridos y emociones no manifestadas, atascadas desde que decidiste, para protegerte, dejar de hacer uso de tu memoria.
“Si quieres hacer del mundo un lugar mejor para vivir,
mira al ser que tienes frente al espejo, y haz un cambio.”
M. Jackson (1958-2009)
Es la primera vez que entro en este blog... Si las entradas precedentes tienen un 10% del contenido que tiene esta, me las voy a leer todas. wow! Aunque me ha costado 10 minutos en reponerme de la imagen inicial, hummm, no, aún me tiemblan los pulmones...y respiro entrecortado...
ResponderEliminar"Abortar" es un verbo que hemos inventado para resumir de lo que se trata el anular unos 70-80 años del desarrollo personal (con lo que implica de vivencias, sentimientos, memoria, relaciones e interacciones, etc.) de alguien a quien se lo quitamos todo. Incluso le quitamos a su probable descendencia. No abortamos a un sólo individuo, sino a toda su estirpe. Es un genocidio individual y colectivo, cuando lo multiplicamos por miles.
ResponderEliminarQue luego los restos humanos sirvan como bocado exquisito para alguien, aunque suene escandaloso, es casi una anécdota en comparación con lo anterior. Cuando ya has despreciado una vida tanto como para haberla anulado, ¿se puede cometer alguna maldad superior?, ¿comértela, asada o en conserva, abandonarla en medio de una calle, ignorarla, dársela a los perros?. ¿Necesitarás justificarlo, si no tienes corazón?.
Es terrible Rocío. Ni tú ni yo podemos permanecer insensibles ante realidades como esta. Pero también sabemos que esto, o cualquier otra atrocidad cometida por algún ser humano, ha sucedido durante mucho más tiempo del que tú o yo hemos estado viviendo aquí. ¿seguirá pasando? No sé. Lo que sí sé es que yo no quiero vivir en el mismo mundo en el que habiten seres abyectos y alienados. Por eso he decidido que, si siguen así las cosas, yo me abstengo de regresar a este planeta.
ResponderEliminar