Todos los "ismos" matan, pues son sistemas de pensamiento corporativos.
No es lo mismo ir al futbol con tu hijo a ver un espectáculo deportivo
(y si "pierde" "tu" equipo, no pasa nada, otra vez será) que adherirse a
una hinchada. No es lo mismo hacer un fondo común para pagar una comida
en una excursión que fundar un partido comunista. No es lo mismo ser
social ( sociable ) que ser socialista. Igual que aceptamos que no es lo
mismo la amistad que el amiguismo, tampoco Cristo tiene que ver con el cristianismo.
Es curioso porque ningún hombre presume de machista, pero muchas
mujeres se escudan tras el feminismo. Decía Virginia Woolf que durante
mucho tiempo ser mujer significó ser anónimo. Está claro que donde las
dan las toman y estos tiempos convulsos son testigo del fin de una forma
anquilosada de pensar donde la frontera entre la galantería y el abuso
era muy difusa. En la misma India se está cuestionando el sistema de
castas. Los hombres machistas son, aunque suene raro, hombres asustados
en un nivel muy profundo, temerosos de ser abandonados, inseguros de su
masculinidad. Detrás de cada machista/don juan hay un gay muy escondido
en su armario de prepotencia patriarcal. Es la postura típica de quienes
tuvieron en su infancia un padre ausente/violento. Cuando sometes a una
persona del "otro" sexo es porque temes su poder latente, igual como
los EEUU (occidente/hemisferio cerebral izquierdo) están aterrados con
el despertar de China (oriente/ hemisferio derecho). El hombre (mejor
dicho, el hemisferio izquierdo, la parte pragmática de la mente, ha
dominado la escena polarizada durante un ciclo. Todo apunta a que, a
pesar de los coletazos de pelele, nos dirigimos inexorablemente hacia el
reencuentro y confraternización de los 'opuestos'. Las actitudes de los
niños lo demuestran.
https://www.facebook.com/SalvadosTV/videos/10153274427285877/
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