Despertares

Habrás escuchado de un tiempo a esta parte muchas veces eso de que 'hay que despertar del sueño'. Incluso puede que te hayas irritado al no comprender qué significa esa expresión y hayas concluido que está vacía y desprovista de contenido. Muchos de quienes la hemos repetido como loros probablemente tratábamos de compartir nuestra estupefacción ante la mentira que estábamos descubriendo, si bien en el fondo no sabíamos del todo lo que decíamos. No hasta que...reparamos en algo: No hay ningún problema con soñar. Soñar es maravilloso. El problema es cuando sueñas sin ser consciente de que estás soñando, cuando eres 'presa' de tus sueños. En inglés dicen:"May your dreams come true" (que tus sueños se hagan realidad). Es más que un augurio, un 'buen deseo' que se dice para quedar bien cuando has soplado las velas de tu tarta de cumpleaños. Es un anhelo que todos tenemos de recuperar la lucidez, la consciencia, el dominio sobre los pensamientos, sobre la mente, ese instrumento tan infrautilizado en su esencia y tan sobreexplotado en su superficie.
La vida es sueño decía Calderón de la Barca. También Shakespeare sugirió que esta vida no es más que "el sueño de una noche de verano". Y no lo dijeron por decir. Por entonces no había otro medio de filtrar esa verdad en el inconsciente más que con versos y poesía. De lo contrario te exponías a la hoguera. Fueron sin duda adelantados a su tiempo, como tantos otros (Copérnico, Galileo...). Pero luego vinieron otros (Freud, Einstein, Jung, Tesla...) y más recientemente la cinta Matrix, que confirmaron las sospechas.
Luchar por tus sueños, hacerlos realidad cueste lo que cueste y caiga quien (los apegos y adicciones) caiga, es la mejor terapia para salir del adormecimiento de la ensoñación, la personal y la colectiva ¿no te has fijado que los bostezos se contagian? Pues eso...No sólo eso, sino que dirigir tus sueños es una 'utilidad' que está codificada en tu (mi, nuestra) naturaleza. Somos creadores de Universos. Y eso es precisamente aquello a lo que la oscuridad (las jerarquías del teatro) de este mundo no quiere que despiertes. Por eso la máquina redobla sus esfuerzos para mantenerte distante de tu centro, hasta el punto de inocularte culpabilidad transmitiendo mensajes confusos e incomprensibles acerca de la verdad. La 'mejor' manera de disuadirte de estar en paz es hacerte creer que la paz es una entelequia, un sueño inalcanzable.