ES TIEMPO DE DESPERTAR DEL LETARGO

Sí. Es tiempo de despegar el culo de nuestros sofás y de hacer algo de lo que un día podamos sentirnos orgullosos. Un día en que nuestros nietos puedan decir con satisfacción: "Mi abuelo/a no fue un cordero más en el rebaño de la mediocridad, sentenciado desde el nacimiento a ser esquilado año tras año, para un día acabar rodeado de una guarnición de patatas, en la mesa de su dueño o de aquél a quien había sido vendido. No, él/ella fue de aquellos que derribaron estructuras y convencionalismos trasnochados y ayudó a despertar consciencias adormecidas, para dar sentido al nuevo Renacimiento que mis padres han iniciado y que nosotros estamos disfrutando. Mi abuelo/a rechazó las mentiras de siempre y no se contentó con ver pasar sus años al amparo del viejo adagio: "virgencita, virgencita, que me quede como estoy". Al contrario, fue de l@s que abrieron los ojos y asumieron su rol de precursor/a de nuevos paradigmas. Creyó en los cuentos de hadas y en la eternidad. Dijo basta a los manipuladores de la verdad y sonrió cada mañana a todo aquél con que se cruzaba, derribando los muros de las suspicacias. Les dijo a los niños "tu puedes" y jugó con ellos sin importar el tiempo invertido. Les habló a los ancianos de la nueva vida después de este sueño fugaz. Habló con los árboles y los animales, con las flores y con los seres del más allá, y comprendió que el tiempo no es lineal, sino como un acordeón que va y del que se puede venir extrayendo las más maravillosas melodías.