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miércoles, 20 de julio de 2011

2,3 millones de bloques






Se dice que la Gran Pirámide de la meseta de egipcia de Gizeh fue construida en torno al año 2250 a. C. por el segundo faraón de la cuarta dinastía, Keops (Khufu). La creencia reinante todavía entre la comunidad arqueológica es que fue proyectada pura y simplemente como un monumento funerario con el que honrar al faraón. Sin embargo esta conjetura no deja de presentar muy serias lagunas, pues nunca se ha encontrado allí la momia de ningún faraón; tan solo un pobre sarcófago sin adornos en el interior de la llamada Cámara del Rey. El sarcófago no presentaba cobertura alguna y estaba completamente vacío cuando fue descubierto por el Califa Al-Mamún, un gobernante árabe de Egipto que accedió al interior de la pirámide con un grupo de excavadores en el s. IX d. C.
Para añadir misterio al enclave, era evidente que todas las pirámides de la meseta de Gizeh estaban exactamente alineadas con los puntos cardinales (norte, sur, este y oeste). Pensé en lo difícil que era explicar como semejante hito topográfico pudo haberse materializado con tanta antelación a la supuesta fecha de la invención de la brújula, también llamada compás magnético, que se cree fue inventada en China, aproximadamente en el siglo IX (Si bien el descubrimiento de un artefacto Olmeca de hematita, que funcionaba de forma similar a una brújula, ha generado controversia suficiente para conjeturar que los Olmecas podrían haber descubierto y usado una brújula de magnetita desde antes del año 1000 AC).
Pero lo que más me intrigaba de la Gran Pirámide era sencillamente su tamaño. Averigüé que la cantería del núcleo del edificio, que ocupada una superficie de 5,2 hectáreas, estaba compuesta por no menos de 2,3 millones de bloques de caliza que pesaban cada uno aproximadamente 2,5 toneladas. El historiador y geógrafo griego Heródoto, (425 a. C.) informado por un sacerdote egipcio, aseguraba que la Pirámide de Keops fue construida en solo 20 años por equipos de 100.000 obreros que trabajaban sólo durante los tres meses de ocio forzoso en la agricultura, y que la técnica empleada consistía básicamente en la utilización de palancas hechas con árboles bajos. Esa es la versión que ofrecen los guías oficiales egipcios a los visitantes en la actualidad. Ningún investigador ha sido capaz de conjeturar cómo pudieron ser utilizados estos troncos a modo de 'palancas'. Sin embargo, teniendo en cuenta el tiempo necesario para la nivelación del terreno (y el terreno está inusitadamente bien nivelado), la preparación de las piedras, y otros trabajos de ingeniería imprescindibles, P. Garde-Hansen, del Instituto de Ingeniería danés, calculó que habría habido que colocar 4000 bloques diarios, a razón de 6,67 bloques por minuto, es decir 1 cada 8 segundos!



 Y ¿cómo fueron transportados dichos bloques hasta el cénit (152 metros) de la pirámide?
Por lo demás, el mismo faraón Khufu (Keops), jamás reclamó para sí la autoría de la construcción de dicha pirámide. Tan solo aseguró haber efectuado ciertas reparaciones en la estructura, así como la construcción de las tres pequeñas pirámides ubicadas a los pies de la Gran Pirámide, como edificación funeraria para él mismo, su esposa y sus hijas. No me extenderé más en este tema. Más argumentos para quien quiera documentarse, aquí. Y esto no es más que el aperitivo de todo lo que estamos empezando a 'desaprender'. 

Extractos de autores (Graham Hancock, Zechariah Sitchin)




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